Me encanta hacer tartas especiales por su cumple, tartas que de alguna manera se identifiquen con ella, y esta, es una de ellas. La tarta colibrí, tiene su origen en el sur de los EEUU, por su nombre, habréis deducido que hace mención al nombre de un precioso pájaro, el colibrí, que es simbolo de dulzura y buscador incesante del néctar de las flores.
Por ese motivo, la elegí, por su dulzura a la vez que frescura, debido a las frutas que lleva el bizcocho. Es una tarta tropical, fresca, aromática, y muy dulce, igual que mi pequeña.
La verdad es que es una tarta muy sencilla de hacer, y os aseguro que quedaréis muy bien ante vuestros invitados. Paso a detallaros los ingredientes y elaboración:
INGREDIENTES:
PARA EL BIZCOCHO:
2 Huevos
1 Yema
100 gr. Azúcar blanca
100 gr. Azúcar moreno de caña
125 gr. Aceite girasol
225 gr. Harina
1 Cucharadita de canela
1/2 Cucharadita de bicarbonato
1/2 Cucharadita de sal
50 gr. Nueces picadas
50 gr. Coco rallado
175 gr. Piña al natural
200 gr. Platano maduro
1 Cucharadita extracto de vainilla
PARA EL FROSTING DE QUESO:
125 gr. Mantequilla pomada
300 gr. Queso Philadelphia
500 gr. Azúcar glas
1 Cucharada de extracto vainilla
Virutas en colores de chocolate (opcional)
ELABORACIÓN:
Lo primero que haremos será precalentar el horno a 180º
Picaremos las nueces y reservaremos. La piña, la trituraremos, no hace falta que esté excesivamente triturada.
Y el plátano lo haremos puré. Reservaremos.
Cogeremos 3 moldes de 18 cm de diámetro y los engrasamos con un poco de haceite, y en la base, pondremos papel de horno para que no se pegue.
Tamizamos la harina, la canela, la sal, el bicarbonato y el coco.
Batimos los huevos y la yema con los dos tipos de azúcar durante un minuto, hasta conseguir una mezcla homogénea. A los ingredientes tamizados, incorporamos las nueces. A la mezcla del huevo y azúcar, echamos, el aceite, la vainilla, la piña y el plàtano, seguimos batiendo. Una vez mezclado, incorporamos la mitad de lo que tamizamos, y seguimos batiendo, despacio, solo lo justo hasta que se haya integrado la harina, despues echamos el resto de la harina, y lo mismo, mezclamos despacio. Repartimos la mezcla por igual en las 3 bases, podéis hacerlo a ojo, o si lo preferís podéis medir la masa y dividirlo en 3. Hornear durante 25 min. mas o menos, dependerá de vuestro horno, pero para aseguraros, deberéis pinchar un palillo, y si este sale seco, ya están listos.
Mientras tanto prepararemos el frosting de queso. Para ello tendremos que batir la mantequilla con el azúcar glas tamizada previamente, mas o menos durante 3 minutos. Veremos que habrá blanqueado y estará cremoso. Es en ese momento cuando echemos el queso, batiremos de nuevo un par de minutos mas, entonces incorporamos el extracto de vainilla, y batimos 2 minutos mas. Ya estará lista, reservaremos en la nevera hasta su uso. Pasado el tiempo de horno, sacamos los bizcochos y dejamos enfriar durante 15 minutos en una rejilla.
Desmoldaremos y dejaremos enfriar de nuevo en la rejilla hasta su total enfriamiento.
Una vez pasado ese tiempo, procedemos a montar. Sacamos la crema de la nevera y meteremos en la manga pastelera con la boquilla que mas os guste, Yo puse una redonda para el relleno y en la base hice unas florecitas con la boquilla de estrella. Y encima le podéis colocar unos fideos de chocolate, o unas nueces picadas o lo que mas os guste.
La metéis en la nevera un par de horas antes de consumir para que la crema coja consistencia, y ya la tendréis lista para comer. La verdad es que es una tarta muy especial, porque ya desde que empiezas a hornear los bizcochos, se impregna la cocina con su olor tan especial, es realmente, increible, no dejéis de hacerla porque veáis una lista enorme de ingredientes, ya que en el momento que tengáis todos preparados, la elaboración es muy muy muy sencilla, os lo garantizo. Espero os haya gustado esta receta tan especial. Besitos
